Qué es?
El Budismo Zen no se considera una religión real sino una filosofía dentro de la cual la teoría principal se basa en «vivir» en plena conciencia, respetando una práctica constante y profunda de meditación.
Es una forma de despertar, la palabra Zen es la esencia del espíritu religioso.
Entonces, ¿en qué consiste?
Es la fusión de la conciencia individual con la universal. El zen es una actitud que se aplica a cada situación y condición diaria de nuestra vida, en cada pequeño gesto. Es dar amor, alegría, aceptación en cada compromiso que enfrentamos.
«Cuando has vivido» despierto «durante el día, puedes morir en paz al atardecer». Proverbio zen.
¿Qué significa meditar?
ZAZEN: Meditación del Buda.
Significa permanecer en un estado de atención profunda al conectarse con la propia respiración y permitir la activación del espíritu.
Consiste en tomar una posición sentada con las piernas cruzadas y la columna muy recta, y sentir literalmente que tu cuerpo toma conciencia del momento presente y enfoca tu atención en tu propio conocimiento.
El corazón comienza a armonizar su ritmo, el cerebro comienza alinear sus ondas cerebrales, el metabolismo se equilibra y se fortalece.
La mente después de la meditación se vuelve más clara y el cuerpo más activo.
Sutra: enseñanza del Buda.
Los Sutras son grandes enseñanzas que provienen de los grandes maestros. En el pasado, se transmitían oralmente antes de transcribirse. Ahora se recitan a través de ejercicios de respiración, se cantan y a veces incluyen asanas físicas. Es un proceso de transformación del individuo que deriva de la enseñanza de nuestro subconsciente, todo está incorporado.
Samu: trabajo consciente.
Toda la enseñanza de la meditación se «refleja» a la vida diaria y a sus “deberes», a través de la atención consciente: ¡todo lo que estás haciendo, pensando, viviendo se hace con plena CONCIENCIA! Atención al estado interior.
Samadhi: Es el sello oceánico.
Es un estado meditativo de conciencia que corresponde a su disolución a través del cual se abandona la percepción sólida para entrar en la experimentación del infinito del espacio y la conciencia.
El silencio externo conduce al silencio de la mente y, en consecuencia, al silencio de los pensamientos. ¡El interruptor mecánico de nuestra mente se apaga y desde aquí comenzamos a pensar con mayor claridad y creatividad! Todos los seres vivos poseen el potencial para lograr su conciencia, naturaleza, identidad y que todo es UNO.
Así que podemos concluir diciendo que el Budismo Zen no es más que una forma de vida, un proceso mediante el cual dejamos atrás estados de ansiedad y preocupación para alcanzar un nivel de paz y alegría en cualquier situación de la vida. Que sea complicado o fácil, cada momento vivido durante nuestro día, hora, minuto de la vida debe ser afrontado y percibido desde una actitud de amor, aceptación y paz. No es un proceso que surge de la noche a la mañana si no una práctica constante, dura y llena de atención. Como todos los tipos de entrenamiento que existen en las prácticas generales, el Budismo Zen alcanza su plenitud solo cuando uno se da cuenta verdaderamente de su significado.