Porqué muchas personas desarrollan cierto apego emocional con algún lugar en particular? Que es lo que hace que un sitio sea tan significativo y atractivo?
Es frecuente asociar los momentos cruciales de la vida a ciertos lugares. Lugares donde hemos sido inmensamente felices, lugares especiales con el que hemos compartido sentimientos, emociones o momentos irrepetibles. Siempre volvemos a los viejos sitios donde amamos la vida, incluso volvemos a esos lugares en imaginación para volver a sentir las emociones y los sentimientos que se quedaron en nuestra alma durante los años. Todo aparece más mágico, ese lugar brilla más después de saber que le has guardado fidelidad. Es un secreto entre los dos que no encarcela, nos hace ser libre!
Hay una energía atractiva entre personas y lugares, pero no todos adquieren un sentido especial. Que es lo que le da importancia? Las conexiones emocionales que las personas generan con los lugares se desarrollan de diferente manera. La cultura, la comunidad local, la historia, las amistades, la belleza, la gastronomía son todos factores que influyen esta conexión. Hay momentos increíbles en los que estamos presente fisicamente, lo qual provoca un deseo imperioso de regresar. Las experiencias del ser humano hacen que se quede un sentimiento profundo de amor en relación con el lugar que vivimos, y guardamos esos recuerdos como si fueran un tesoro.
Mi amor por la Cerdeña
Los sentimientos y las emociones que más quiero están guardada en la isla más bonita del mundo: la Cerdeña. Es una de las dos islas más grande de Italia. No soy nativa pero hice seis temporadas laborales. En este lugar entendí que lo que te hace sentir en casa no es ni la familia, ni la infancia, ni las viejas amistades. Lo que hace subir este sentimiento es la vibración energética que percibes y que nunca tuviste en ningún sitio. Es imposible explicarlo, escribirlo, entenderlo. Solo puedes vivirlo.
Ahí empecé a sentirme conectada de mi proprio ambiente, como si volviese a la tierra de mis ancestros, como si tuviese un sentimiento de pertenencia respecto al lugar donde todavía no conocía nada. A medida que han ido pasando los años me di cuenta de que aunque me encantaba viajar y lograr nuevas experiencias por el mundo, ese era el lugar donde más quería regresar. La naturaleza perfecta y salvaje, el mar cristalino, los vinos divinos, el viento poderoso, los olores más sutiles están arraigados en mi. Estos aspectos se pueden encontrar por todas partes pero no siempre se percibe esa fuerte atracción.
El universo decide y deja que eso ocurra. La gente no entiende por que todavía no me he mudado. Agradezco la vida por descubrirla, y a través la intención, el pensamiento y el amor vuelvo a sentir las emociones como si fueran presente.